“Los hermanos sean unidos
porque esa es la ley primera;
tengan unión verdadera
en cualquier tiempo que sea,
porque si entre ellos pelean
los devoran los de afuera.”
La poesía de José Hernández en el “Martín Fierro” ha sido ampliamente reconocida como un reflejo profundo de la cultura, los valores y las luchas de la Argentina rural del siglo XIX. Dentro de esta obra monumental, hay versos que trascienden el tiempo y el espacio, resonando con principios universales que han sido valorados por diversas tradiciones y filosofías. Uno de estos versos es la advertencia sobre la importancia de la unión entre los hermanos, un mensaje que no solo es relevante en el contexto del gaucho argentino, sino que también tiene profundas implicaciones masónicas.
La fraternidad como base de la masonería
En la masonería, la fraternidad es uno de los tres pilares fundamentales, junto con la libertad y la igualdad. La fraternidad no solo se refiere a la amistad entre los miembros de la Orden, sino a un lazo profundo que une a los masones en un propósito común: la construcción de un mundo más justo y equitativo. Este lazo fraternal es sagrado y se mantiene a través del respeto mutuo, la confianza y la ayuda desinteresada.
El verso de Hernández, “Los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera”, resuena directamente con este principio masónico. La unión entre los hermanos no es solo un consejo prudente, sino una ley fundamental que debe ser respetada y mantenida para preservar la integridad del grupo. En la masonería, esta unidad es esencial para que la logia funcione armoniosamente y para que sus miembros puedan trabajar juntos hacia el logro de objetivos comunes.
El concepto de fraternidad en la masonería también implica un compromiso con la verdad y la justicia. Los masones están unidos no solo por lazos de amistad, sino por una misión compartida de búsqueda del conocimiento y la defensa de los principios éticos. Al igual que en el “Martín Fierro”, donde la unidad de los hermanos es esencial para resistir las amenazas externas, en la masonería, la fraternidad es vista como una fuerza protectora que permite a los hermanos superar los desafíos y obstáculos en su camino.
La unión verdadera en la masonería
Hernández continúa con su exhortación: “tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea”. Aquí, la “unión verdadera” sugiere una fraternidad sincera y genuina, no superficial o basada en intereses temporales. En la masonería, la autenticidad de los lazos fraternales es de suma importancia. Los masones se comprometen a ser leales y honestos con sus hermanos, y a sostener la verdad y la justicia en todas sus acciones.
La unión verdadera en la masonería también implica la superación de las diferencias individuales. En la logia, todos los miembros son considerados iguales, independientemente de su origen, posición social o creencias personales. Esta igualdad es fundamental para la unidad de la logia, ya que permite que todos los hermanos trabajen juntos en un ambiente de respeto y comprensión mutua.
Además, la masonería enseña que esta unión verdadera debe mantenerse “en cualquier tiempo que sea”, es decir, en todas las circunstancias, tanto en tiempos de paz como de conflicto. Los masones están llamados a mantenerse unidos, incluso en momentos de desacuerdo o dificultad, y a resolver sus diferencias a través del diálogo y la comprensión mutua. Esta constancia en la unión es esencial para el éxito de la misión masónica y para la construcción de un mundo mejor.
La solidaridad y la defensa mutua
El consejo de Hernández se cierra con una advertencia clara: “porque si entre ellos pelean los devoran los de afuera”. Aquí, se enfatiza la importancia de la solidaridad y la defensa mutua entre los hermanos. En la masonería, la solidaridad es otro de los principios fundamentales que une a los miembros de la Orden en un compromiso de apoyo mutuo y protección.
La idea de que “los devoran los de afuera” refleja la realidad de que las divisiones internas pueden debilitar cualquier grupo, haciéndolo vulnerable a las amenazas externas. En la masonería, se enseña que la unidad y la solidaridad entre los hermanos son esenciales para proteger la logia de influencias negativas y para mantener la integridad de sus principios y enseñanzas.
Esta solidaridad también se extiende a la defensa de la humanidad en general. Los masones se ven a sí mismos como defensores de los derechos humanos y la justicia, y están comprometidos a luchar contra la opresión y la injusticia dondequiera que se encuentren. La unidad y la solidaridad entre los masones les permite ser más fuertes en esta lucha y les da la capacidad de enfrentar y superar los desafíos externos.
El concepto de hermandad universal
La masonería, aunque es una fraternidad que se organiza en logias locales, se considera una hermandad universal. Esto significa que los principios de fraternidad, igualdad y solidaridad que se practican dentro de una logia particular se extienden a todos los masones del mundo, creando una red global de apoyo y cooperación.
El mensaje de José Hernández en el “Martín Fierro” también puede interpretarse en este sentido universal. Los hermanos deben estar unidos, no solo en el contexto de la familia o la comunidad local, sino en un sentido más amplio que incluye a todos aquellos que comparten los mismos valores y principios. En la masonería, este concepto de hermandad universal es fundamental, ya que permite a los masones trabajar juntos, sin importar su ubicación geográfica, para lograr objetivos comunes y para promover la paz y la justicia en el mundo.
La advertencia de José Hernández sobre las consecuencias de la división interna también tiene una relevancia particular en el contexto de la masonería. Las divisiones y los conflictos internos pueden debilitar la Orden y hacerla vulnerable a las influencias externas que buscan socavar sus principios. Por lo tanto, la masonería pone un gran énfasis en la resolución pacífica de conflictos y en la promoción de la unidad y la cohesión dentro de la logia.
La relevancia contemporánea del mensaje de José Hernández
El mensaje de José Hernández en el “Martín Fierro” sigue siendo relevante en el mundo contemporáneo, tanto dentro como fuera de la masonería. En un mundo que a menudo se ve fracturado por divisiones políticas, sociales y culturales, la exhortación a la unidad y la fraternidad es más importante que nunca. La masonería, con su énfasis en la hermandad universal y la solidaridad, ofrece un modelo para cómo los individuos y las comunidades pueden superar sus diferencias y trabajar juntos por el bien común.
En el contexto masónico, este mensaje también refuerza la importancia de la cohesión y la solidaridad dentro de la Orden. Los masones están llamados a ser un ejemplo de fraternidad y unidad en sus comunidades y a trabajar juntos para construir un mundo más justo y equitativo. El consejo de Hernández sirve como un recordatorio de que esta unidad es esencial no solo para el éxito de la misión masónica, sino también para la protección de los principios y valores que la Orden defiende.
El análisis de los versos de José Hernández desde una mirada masónica revela una profunda conexión entre el mensaje del “Martín Fierro” y los principios fundamentales de la masonería. La exhortación a la unidad, la fraternidad y la solidaridad resuena fuertemente con los ideales masónicos de fraternidad, igualdad y justicia.
Además, la advertencia sobre las consecuencias de la división interna subraya la importancia de la cohesión y la defensa mutua dentro de la logia y en la comunidad masónica en general.
Este análisis también destaca la relevancia contemporánea del mensaje de Hernández. En un mundo cada vez más dividido, la masonería ofrece un modelo de fraternidad y unidad que puede servir como guía para cómo las personas y las comunidades pueden superar sus diferencias y trabajar juntas para construir un futuro mejor. La masonería, con su enfoque en la hermandad universal y la búsqueda de la verdad y la justicia, continúa siendo una fuerza positiva en la sociedad, inspirada por principios atemporales como los que se encuentran en las palabras de José Hernández.
