La historia comienza en Yapeyú, una reducción Jesuítica, muy anhelada por los portugueses, ya desde su fundación. Para asegurar su control es nombrado, el capitán Juan de San Martín, quien ejerce el cargo de teniente gobernador de la inhóspita zona. Se mudó al lugar junto a su esposa doña Gregoria Matorras, quien se dedicara a la crianza y educación de sus hijos. Siendo el menor de sus hijos José Francisco, nacido el 25 de febrero de 1778.
En Yapeyu encontramos un tercio de la casa donde nació el general San Martín, sus paredes fueron levantadas por los nativos con una roca una arenisca de la zona, que traían en bloques, que cortaban de canteras cercanas del lugar. Unían la roca con adobe y se puede observar también, en la altura del techo, que era a dos aguas con galerías de cada lado de madera dura, cubiertas por tejas.
A fines de 1783 don Juan de San Martín y su familia se embarcaron en la fragata de guerra Santa Balbina, y al cabo de 108 días de viaje llegaron a la bahía de Cádiz, en 1784, su padre concluye sus tareas y la familia regresa a Buenos Aires con la decisión de retornar a España.
Siguiendo los pasos de su progenitor, José Francisco se incorpora al ejército español, en el regimiento de Murcia. Teniendo su bautismo de fuego con sólo 13 años en Orán, África. Desarrolla en España una destacada carrera militar, interviniendo en 31 batallas, de las cuales dos fueron marítimas. Siendo las más importantes Arjonilla y Bailén. Hace una brillante carrera militar en España, siendo un oficial sobresaliente del ejército español.
San Martín y el germen revolucionario
Hay un San Martín, que está en el ejército y es un oficial brillante, valeroso, condecorado y leal. Pero hay un San Martín, que mientras combatía fue incubando las ideas de la revolución, incorporando a los libros militares y técnicos también a los ilustrados de la enciclopedia, a Diderot y a Voltaire.
Habiendo alcanzado el grado de teniente coronel de caballería, en 1811 toma la decisión de dejar la tierra de sus padres y se traslada a Londres, donde junto a otros patriotas como Miranda, Guido, Alvear y Zapiola comienza a elaborar lo que sería el plan de la independencia Americana. Embarcado en la fragata George Canning, llega al puerto de Buenos Aires el 9 de marzo de 1812, se le reconoce su grado militar y se le encomienda la formación de un regimiento de caballería que posteriormente se conocería como el Regimiento de Granaderos a caballo. Para quien redacta un riguroso código de honor, es introducido a la sociedad porteña en la casa de la familia Escalada, conociendo allí a Remedios, con quien contrae matrimonio en septiembre de 1812.
En febrero de 1813, al mando de sus granaderos se dirige a San Lorenzo, en el convento de San Carlos, combate triunfante a los realistas en lo que sería su primera y única acción militar en territorios del Río de la Plata. Regresa a Buenos Aires, donde es designado jefe el ejército auxiliar del Alto Perú, también conocido como Ejército del Norte, al hacerse cargo del mismo conoce a quien sería su gran amigo y con quien compartiría los principios de la libertad y la necesidad de la declaración de la independencia, el general Manuel Belgrano.
San Martin y el ejercito de los Andes
Luego de haber ordenado a las fuerzas patriotas en el norte pide ser nombrado intendente gobernador de Cuyo con la finalidad de formar un ejército pequeño y disciplinado para pasar hacia Chile y liberarlo del poder español, luego de su encuentro en el norte con el general Belgrano y con el general Güemes, San Martín ha bajado a Córdoba luego de renunciar al mando del Ejército del Norte, espera en Córdoba llamativamente la designación de Gobernador Intendente de Cuyo.
A fines de agosto recibe, mientras está en su estancia de Saldán, esta designación de gobernador e intendente de Cuyo y en un viaje realmente relámpago en muy pocos días llega a lo que era en ese momento la provincia de Cuyo integradas por las actuales provincias de Mendoza, San Juan y San Luis, a los pocos días que San Martín ha llegado a Cuyo en octubre.
Los primeros días de octubre, Chile cae nuevamente en manos realistas y el riesgo de invasión es latente, pero al mismo tiempo va a desarrollar una gran tarea de orden público el proceso de vacunación, fue uno de los impulsores de la vacunación contra la viruela. San Martín ha ordenando las cuentas públicas y desarrollará también una gran tarea cultural y por supuesto abocado a la formación del Ejército libertador de los Andes y ganar, el resultado se vive en ese momento, no hay segunda chance, es una epopeya que no tiene parangón que no la valoramos lo suficiente, sobre todo cuando pensamos en el costo social y humano 50 mil almas. Todo Cuyo tiene 50 mil personas y San Martín tiene que poner un ejército en pie con 5000 soldados bien pertrechados.
Haciendo la cuenta es casi el 10% de la población porque fue, justamente el apoyo del pueblo de Cuyo, de Mendoza de San Juan y de San Luis que con sus recursos, pero también con sus vidas y con sus hombres con padres y con sus hijos formaron el Ejército de los Andes. Aportaron la sangre que se derramaría fundamentalmente en la guerra de la independencia, prácticamente todas las familias cuyanas tienen a alguien en ese ejército cumpliendo con la voluntad de emancipar Chile
El mítico cruce de los Andes
Nosotros conocemos la aventura asombrosa del Cruce de los Andes, se aventuró desde Mendoza, enfermo para entender la magnitud de la epopeya, estaba muy enfermo así sufrió horrores, recordemos que además de haber sufrido úlceras duodenales y una cantidad de enfermedades que hizo que tuviera que acudir al opio con cierta frecuencia, sobre todo hacia el final de su vida.
Desde Cuyo San Martín incide fuertemente sobre los diputados que representan su región en el congreso de Tucumán y los insta a declarar la independencia sin demoras. Sin duda el congreso de Tucumán no se hubiera reunido sin la insistencia y el apoyo político que le dio San Martín, el apoyo político y militar que también le van a dar Belgrano y Güemes.
El momento no era propicio para que las provincias unidas avanzaran en la declaración jurídica de la independencia, militarmente los ejércitos de la patria habían obtenido reveses y San Martín comenzará a bregar desde Cuyo. Cuando llegan los diputados a Tucumán, especialmente en la voz de Tomás Godoy Cruz.
El joven diputado Tomás Godoy Cruz comenzará a bregar primero por la reunión del congreso y después por la declaración de independencia el 24 de mayo de 1816, San Martín escribió una extensa carta Godoy Cruz, esas palabras son toda una argumentación de por qué San Martín cree que ya es momento de declarar la independencia.
San Martín desde Cuyo entonces propiciará la declaración de independencia, esa declaración que necesita como el acto jurídico supremo, para poder iniciar su gran campaña de liberación para cruzar Los Andes con un ejército libertador y no conquistador, apoyado en ese instrumento jurídico que fue la declaración de independencia de las Provincias Unidas de Sudamérica.
La liberación de América
A instancia de nuestros padres fundadores Belgrano y San Martín declaró la independencia de las Provincias de Sudamérica, no sólo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Porque el congreso de Tucumán implica en ese gran plan de liberación continental un paso, una etapa fundamental desde la cual San Martín concreta la acción de libertad e independencia de medio continente.
En enero de 1817 inicia una gran epopeya cruzando la cordillera de los Andes por seis pasos distintos, en veintiún días cruzó cuatro veces los Andes, alguna en camilla, por supuesto por sus dolencias. Es cuatro de ida y cuatro de vuelta. Hay que decir San Martín, a poco de llegar al territorio Chileno, enfrenta a los realistas en la batalla de Chacabuco, siendo este el primer triunfo de las armas de la patria y el primer pasó hacia la consolidación de la independencia.
Reciben un revés en Cancha Rayada, logrando reorganizar sus tropas y volviendo a la decisiva victoria en la batalla de Maipú, con lo que se reafirma la independencia Chilena. Rechazando San Martín todos los cargos y honores ofrecidos y resolviendo constituir un gobierno patrio bajo la conducción de Bernardo de O’Higgins. La amenaza del poder español no había cesado siendo necesario continuar su plan de liberación continental dirigiéndose por mar hacia el Perú.
Es impresionante porque realmente eran una cosa completamente novedosa, de estas costas para arribar al Perú y con gran incertidumbre al respecto. Lo hace en octubre de 1820, se crea la primera bandera del Perú, era necesario crear un símbolo por el cual los peruanos peleasen por su independencia. También crea la Alta Cámara de Justicia, que es la institución que reemplaza a la Real Audiencia. Muchos de los que pertenecieron a la Real Audiencia posteriormente pasaron a ser miembros de la Alta Cámara de Justicia, fueron los que firmaron entre ellos Julián de Cubillas, que es uno de los tantos firmantes del Acta de Independencia.
Se celebra en Perú el 28 de julio como si fuese una fiesta, pero la fiesta máxima, Pero en realidad la fiesta máxima debía ser el 15 de julio, cuando se firma el acta cuando San Martín convoca el cabildo de Lima, les hace una serie de peticiones entre ellas establece que lo que decida el pueblo peruano, él lo iba a acatar, si decidían por la independencia él iba a continuar con el proceso y en caso contrario, él iba a acatar esa decisión.
Él era muy respetuoso de las decisiones de los pueblos y es un hecho curioso que la proclama que se hace, se hace a la usanza española. San Martín, tampoco quería crear un choque cultural entre los españoles, que ya estaban saliendo de Lima y los que se quedaban en Lima lo apoyaban. Entonces la proclama se hace en diferentes plazas como se hacía antiguamente, con los edictos del rey y del virrey, luego la firma del acta independencia un 15 de julio de 1821 y su posible proclamación un 28 de julio de 1821.
El mismo don José de San Martín establece lo que conocemos como el protectorado, es interesante analizar el tema del protectorado, porque en ello podemos ver el impulso que le da el general San Martín a las letras, las artes, crea la primera Biblioteca Nacional. Con libros que él dona de su propia biblioteca. Comienza a crear una serie de instituciones, como en la marina de guerra del Perú, para crear una nueva flota.
El fin del modelo colonial
Poco estaba funcionando el modelo económico de explotación de plata del alto Perú. el cerro rico de Potosí, porque se acabó la plata y han muerto todos los indios aborígenes esclavizados por los conquistadores españoles, se termina y finiquita el modelo colonial. San Martín también creó el primer banco de emisión, increíblemente eran unos pequeños billetes de dos pesos, que estaban impresos en unos abecedarios.
Lamentablemente no existía el papel moneda así que, lo primero que encontraron en la imprenta, eran unas hojas que tenían el abecedario y sobre el anverso de ese esas impresiones, se crearon los primeros los primeros billetes que se emitieron. Al ver la importancia que le daba el general San Martín a la educación, uno puede analizar cuál era su pensamiento. En todo momento ha establecido para que una persona pueda ser libre, tiene que ser una persona que se instruya, que se culturicen solamente, la educación va a hacer hombres libres.
Si no hubiese sido por lo que construyó durante ese periodo del protectorado y todo lo que le dio al Perú no estaríamos celebrando un bicentenario de la independencia en 1822 entre el 26 y el 27 de julio San Martín se entrevista con el general Simón Bolívar, en Guayaquil, de dicha entrevista se conoce muy poco, salvo lo escrito por los diferentes Edecanes, que estuvieron presentes, pero en realidad no hay ningún registro de lo que fue la reunión.
San Martín y Bolivar
La reunión en Guayaquil no generó ninguna satisfacción para general San Martín, eso hoy parece extraño pero en ese momento en el alto Perú, sobre todo una monarquía de orden parlamentario, podría haber funcionado, abogaba por una monarquía constitucional al igual que Belgrano. por otra parte y si uno lo compara con Bolívar, no estaban tan alejados uno del otro porque Bolívar. Al final está pensando en una suerte de presidencialismo permanente, digamos vitalicio. San Martín regresa y entrega, así como lo había prometido cuando instaura el protectorado, convoca al congreso y entrega el poder al congreso, este le pide que por favor continúe pero San Martín, era consciente como lo podríamos ver y leer un poco después que San Martín, en una de sus cartas, establece que no podrían brillar dos soles sobre una misma tierra.
Cuando observa la anarquía y la guerra intestina, afirma la frase “no quiero manchar mi espada con sangre de mis hermanos”
Renuncia justamente al fratricidio, consolidada la independencia del Perú y luego de sus encuentros con Bolívar decide regresar a su amada Mendoza, donde por distintas razones de carácter político no puede afincarse. Finalizada la Campaña Libertadora, el general San Martín parte a Europa para nunca más volver a pisar tierra Americana, se va con 45 años de edad hoy en día es una persona muy joven, pero claro en esa época él ya había hecho todo, habiendo muerto su esposa, Remedios a temprana edad resuelve recuperar a su hija, Mercedes hasta ese momento bajo el cuidado de su abuela, en 1824 deja definitivamente el territorio del Río de la Plata para exiliarse en Europa.
Visita la tumba de su esposa Remedios es una lápida preciosa que alguien la robó en algún momento. El epitafio “Esposa y amiga” esta idea de la amistad es una idea muy de los reformistas ilustrados, San Martín concibe a la mujer como un par para dialogar para conversar. Los últimos 25 años de su vida, un cuarto de siglo de un hombre que no llegó a vivir tres cuartos de siglo, están totalmente destinados a recuperar el amor de su hija, una niña que él reencuentra a los ocho años en Buenos Aires, con la que había compartido menos de un año de vida. Era casi un desconocido para ella, aprovecha ese exilio europeo para reestablecer el lazo paternal, el lazo filial.
San Martin prepara su retiro
San Martín se define como un buen padre, se ocupa de ser un buen padre, hoy hablamos de padre presente, absolutamente presente en las máximas que dejo escritas, dice ser tolerante con todas las religiones, esto es muy masónico. Tratar con dulzura a los criados, pobres y viejos. Respetar la propiedad ajena, amar el aseo y despreciar el lujo, amar la patria y la libertad. Tenemos acá un conjunto, digamos de virtudes que tienen que ver también con la con la ciudadanía, con la mujer como un ser político. Es muy simple la mirada sobre la vida solidaria de respeto, que practicaba este tipo de acciones en su vida real. Después de hacer un vuelo absolutamente presente vemos a un hombre de familia, cosa extraordinaria. Él se va con su hija Merceditas, vive en diferentes ciudades, en diferentes países, llega a Francia, de Francia se fue a vivir a Londres, de Londres se fue a Bruselas, ahí vive unos años y de Bruselas se fue a París, el periplo del general San Martín en Europa encuentra un lugar, la famosa casa de Grand Bourg a 30 kilómetros al sur de París, sobre las orillas del Sena. La adquiere el general San Martín, es la única propiedad que va a tener en Europa, gracias a la generosidad de su gran amigo Alejandro Aguado el marqués de las Marismas del Guadalquivir. Un personaje a nivel internacional en el mundo de las finanzas, y en el mundo de la empresa, en un momento en que el capitalismo está en expansión, después de la primera revolución industrial.
Allí San Martín se entrevistó con personajes de la talla de Juan Bautista Alberdi, de Domingo Faustino Sarmiento. Vamos a decirlo así, la provincia Buenos Aires es la confederación rosista, no está haciendo nada para que los compatriotas visiten a San Martín en París. Recibía lo dice Alberdi y Sarmiento que lo visitan, con el cuadro pintado por su hija Mercedes, de Bolívar atrás en la pared se convirtió en una gran suerte de consejero a tal punto que en 1844 esa casa fue testigo de un encuentro muy poco conocido por la historiografía, que fue Carlos Marx, el autor del capital pidió entrevistarse con San Martín, para que le trazara una semblanza de Simón Bolívar, fijémonos en este detalle la importancia simbólica de San Martín, que por entonces estaba totalmente retirado de la política, de la milicia y sin embargo seguía siendo una referencia fundamental.
En 1848 se inicia una revuelta civil en París y dice de aquí también me voy y me voy a ir a Londres decide abandonar París y va en tren rumbo a Boulogne Sur Mér para embarcarse rumbo a Gran Bretaña, pero al llegar a Boulogne-sur-Mér esa pequeña ciudad amurallada, ese paisaje tan bello a orillas del Canal de la Mancha, es donde San Martín decide pasar los últimos años de su vida y esa historia es otra historia, pero que tienen que ver con el cariño que por determinados derrubios europeos, tuvo el libertador. Pudo vivir una felicidad que en algún momento los avatares de la historia le negaron en el continente americano
En 1848 llega al que sería su último destino Boulogne-Sur-Mér, llega con su familia con su hija Mercedita o Mercedes el esposo de Mercedes, el señor Mariano Balcarce y las dos nietas del general San Martín. Cuando hacemos referencia a la casa déjenos se nos viene a la imagen la otra casa, la casa de en Grand Bourg, esta casa la conocemos muy poco los argentinos, este es el piso que el general San Martín alquilo y allí vivió y en este piso donde falleció, él tenía su habitación Mercedita tenía su habitación y las hijas de Mercedita, sus nietas también tenían su habitación en el fondo hay un jardín, hoy en día un patio de honor donde hay muchas placas y que hasta el día de hoy se siguen colocando, la habitación del general San Martín, dicho por muchas personas que fueron a la casa, los visitantes tanto extranjeros como argentinos que es una habitación simple, teniendo en cuenta que ahí vivió nada menos que nuestro libertador, el libertador de América. En esa casa transita sus dos últimos años, fallece el 17 de agosto de 1850 a las 15 horas. En 1880 se da cumplimiento a su pedido, que su corazón descanse en Buenos Aires, no recibiendo pompa, ni honores, según su deseo. Sus restos fueron trasladados a su tierra natal desde entonces se encuentran en el Mausoleo de la Catedral. Así transcurrió la extraordinaria vida de un hombre al que hoy descubrimos detrás de un mito.
(Extracto del documental San Martín el hombre detrás del mito)