Juan Crisóstomo Lafinur (1797-1824) fue una figura destacada en la historia de Argentina, no solo por su participación en la vida política y cultural del país, sino también por su legado filosófico y masónico. Su vida, aunque breve, estuvo marcada por una intensa dedicación al pensamiento liberal, la educación, y la lucha por la independencia y la libertad en un tiempo de grandes convulsiones políticas y sociales en América Latina.
El nacimiento de Lafinur en 1797 coincide con una época crucial en la historia de América Latina, caracterizada por los primeros movimientos independentistas que eventualmente conducirán a la emancipación de las colonias españolas. Argentina, como muchas otras naciones del continente, estaba inmersa en una lucha por su independencia, lo que dio lugar a un período de inestabilidad política, guerras civiles y cambios sociales profundos.
Lafinur creció en este ambiente de agitación y transformación, influenciado por las ideas ilustradas que habían comenzado a llegar a América desde Europa. Estas ideas promovían los valores de la libertad, la igualdad y la fraternidad, principios que también resuenan profundamente en la filosofía masónica. El siglo XIX fue un tiempo de formación de las naciones latinoamericanas, y figuras como Lafinur desempeñaron un papel crucial en la construcción de las nuevas identidades nacionales.
Vida y Educación de Juan Crisóstomo Lafinur
Lafinur nació en la provincia de San Luis, en una familia de tradición liberal. Desde joven mostró un gran interés por el estudio, especialmente en los campos de la filosofía y la literatura. Se trasladó a Buenos Aires para continuar su educación, donde entró en contacto con las ideas de la Ilustración y se vio influenciado por el pensamiento de figuras como Rousseau, Voltaire, y otros filósofos ilustrados.
La educación formal de Lafinur en Buenos Aires fue complementada por su participación en círculos intelectuales y políticos, donde conoció a otros jóvenes que compartían sus ideales liberales. Este entorno académico y social alimentó su compromiso con las ideas de libertad y progreso, y lo preparó para su futura participación en la vida política y cultural de la Argentina.
Carrera Política y Filosófica
Lafinur no solo fue un académico, sino también un activista comprometido con la causa de la independencia y la construcción de una nación libre y justa. Se involucró en la política, apoyando a los movimientos revolucionarios que buscaban liberar a Argentina del control colonial español. Además de su participación en la política, Lafinur fue un prolífico escritor y orador, utilizando su talento para promover las ideas de libertad y democracia.
Su carrera filosófica estuvo marcada por una profunda reflexión sobre la naturaleza humana, la sociedad y el papel del individuo en la construcción de una nación. Lafinur veía la educación como una herramienta fundamental para la emancipación, no solo política, sino también intelectual y moral. A través de sus escritos y discursos, promovió la idea de que el conocimiento y la virtud eran esenciales para la formación de ciudadanos libres y responsables.
Lafinur y la Masonería
Lafinur fue un masón activo, miembro de una logia en Buenos Aires que compartía sus ideales liberales y revolucionarios. La Masonería en América Latina durante el siglo XIX fue un movimiento que atrajo a muchos de los líderes de la independencia, y Lafinur no fue la excepción. La fraternidad masónica proporcionó un espacio donde las ideas de libertad, igualdad y fraternidad podían ser discutidas y promovidas, y donde los masones podían apoyarse mutuamente en sus esfuerzos por construir una nueva sociedad.
El enfoque masónico de Lafinur en la autodisciplina, el perfeccionamiento moral y el compromiso con el bien común resuena en su vida y legado. Como masón, Lafinur estaba comprometido con la construcción de una sociedad justa y equitativa, donde los valores de la verdad, la justicia y la fraternidad guiaran la vida pública y privada. Este compromiso se reflejó en su vida política y filosófica, donde siempre buscó alinear sus acciones con los principios masónicos.
Legado de Lafinur
El legado de Juan Crisóstomo Lafinur trasciende su vida, influyendo en generaciones posteriores de pensadores, políticos y educadores en Argentina y más allá. Su énfasis en la educación como base para la libertad y la democracia continúa siendo relevante hoy en día. Lafinur es recordado como un defensor de la libertad y un promotor incansable del conocimiento y la virtud.
En el contexto masónico, Lafinur es visto como un ejemplo de cómo los principios masónicos pueden aplicarse a la vida pública para promover el bien común. Su vida es un testimonio del poder de las ideas y del compromiso con la verdad y la justicia, valores que son centrales en la filosofía masónica.
La vida de Juan Crisóstomo Lafinur, aunque corta, dejó un impacto duradero en la historia de Argentina y en el pensamiento filosófico y masónico. Su dedicación a la libertad, la educación y la justicia lo convierte en una figura inspiradora tanto en el contexto masónico como en la historia general de América Latina. Lafinur es un recordatorio de que, a través del conocimiento y la virtud, es posible construir una sociedad más justa y libre, donde los principios de la verdad y la fraternidad guíen las acciones de los individuos y las naciones.
La Masonería, como parte integral de su vida, influyó profundamente en su pensamiento y en su acción, demostrando cómo los valores masónicos pueden ayudar a formar líderes comprometidos con el bien común y la construcción de un mundo mejor. Su vida y legado siguen siendo un faro de inspiración para aquellos que buscan aplicar los principios masónicos en su vida diaria y en la sociedad en general.
EL FANATISMO
“¿Cuál es ese monstruo fiero
que ha devastado la tierra,
declarando al justo guerra,
y enlazando al embustero?
¿Quién el que al hombre sincero
le calumnia de ateísmo?
El fanatismo.
¿Cuál es la causa fatal
de la falta de instrucción,
de haber tanto motilón
y de propagarse el mal?
¿Quién el de que un animal
nos elogie el servilismo?
El fanatismo.
¿Cuál es el que a los tiranos
protege en sus agresiones,
y fomenta disensiones
entre amigos y entre hermanos?
¿Quién el que a los ciudadanos
les extingue el patriotismo?
El fanatismo.
¿Cuál, el que a la libertad
la mira siempre con ceño,
y en destruirla hizo empeño
con una falsa piedad?
¿Quién hizo que iniquidad
sustituyese al civismo?
El fanatismo.
¿Cuál ha sido el instrumento
para oprimir al virtuoso
y para que el poderoso
le cause al débil tormento?
¿Quién formó tanto convento,
escuela de barbarismo?
El fanatismo.”